Una de las operaciones militares más interesantes que se están llevando a cabo tiene lugar en Morón de la Frontera (Sevilla – España), donde el Pentágono está desplegando una fuerza de intervención rápida constituida por 550 marines y seis aeronaves de despegue vertical Osprey, denominada Fuerza de Respuesta a Crisis Tierra-Aire de los Marines, que tendrán varias misiones por delante, entre ellas intervenir en África en casos de ataques a las embajadas de Estados Unidos o en misiones de combate contra los islamista radicales, y garantizar la seguridad de la base de Rota y de los distintos elementos que desplegará la misión de la US Navy en torno al escudo antimisiles en este emplazamiento.
Este contingente de fuerzas, dependientes del Mando de EE. UU para África (Africom), permitirá al Pentágono proteger el material y el armamento altamente sensible y avanzado que irá llegando a Rota en los próximos meses y años, entre estos los misiles RIM-161 SM-3, cuyas características y diseño permiten eliminar cualquier misil enemigo de largo alcance, y lo convierten en una de las piezas claves del escudo antimisiles, además de los cuatro destructores dotados con el sistema Aegis que integrarán el escudo antimisiles.

El despliegue de los marines en Morón ya ha comenzado mediante aviones de transporte Hercules C-130 y V-22 Osprey de despegue vertical (VTOL), que permiten introducir y sacar rápidamente hasta 32 comandos en escenarios de combate. Una de las versatilidades de esta misión es la capacidad de transportar en apenas quince o veinte minutos más de 200 o 300 militares a un punto de crisis. Una rapidez de reacción esencial de cara a posibles emergencias que se complementará con una adecuada coordinación con otros equipos antiterroristas estadounidenses, vital para hacer frente a una amplia variedad de situaciones.
Sin ninguna duda que haya marines en Morón en una buena noticia para la seguridad de los proyectos que se están poniendo en marcha en esa región y para hacer frente al peligro yihadista.