La pintura ambientada en el Oeste norteamericano siempre ha sido una fuente de inspiración para cineastas, músicos y escritores. Con razones evidentes porque su belleza ha sido y es de lo mejor que se puede encontrar en los museos y galerías de arte.
Uno de estos ejemplos es Charles M. Russell, que realizó más de 2.000 pinturas en las que reflejaba el lejano Oeste, con sus cowboys, indios, y paisajes fascinantes. Charles M. Russell nació en St. Louis, Missouri, en 1864, y vivió la época de la expansión de los vaqueros como figura icónica de la cultura estadounidense. Era un amante de la naturaleza con un talento extraordinario para el dibujo que dejó obras de gran valor.
Charles Marion Russell soñaba con convertirse en cowboy y muy pronto se trasladó a la frontera de Montana, donde llevó una vida de aventuras y conoció de primera mano la cultura vaquera y nativa. Tras años como cowboy, Russell se retiró y se dedicó a pintar acerca de ese Salvaje Oeste que había conocido tan bien.

Hoy es uno de los artistas más reconocidos en Estados Unidos y sus pinturas y esculturas se exhiben en numerosos museos del país. También tiene su propio museo en Great Falls, Montana, y su enorme amor por la naturaleza, que queda patente en sus obras, fue reconocido con el Parque Nacional Refugio de la Vida Salvaje en Montana.
Después de su muerte, en 1926, fueron publicadas por su familia varias historias del lejano Oeste escritas por C. M. Russell, con el título de: “Trails Plowed Under”. La influencia de su obra es enorme en artistas posteriores que han desarrollado su talento en torno a la temática del Oeste, ya sea en pintura, literatura o cine. Por ejemplo, sus cuadros formaron parte de la inspiración del director George Stevens para ambientar el pueblo donde tenía lugar la inmortal película “Shane” (Raíces profundas), uno de los mejores westerns de toda la historia.
Hoy, como ayer, el talento de Charles M. Russell nos lleva inmediatamente a ese lejano Oeste que siempre despierta sensaciones únicas.
No sé ustedes, pero personalmente esto es lo que considero arte cuando se habla de pintura, y no esos dibujos absurdos, mal pintados y que provocan ganas de llorar o reír (según el estado de ánimo) que se ven por ahí hoy día y que pasan por arte. Vean lo que es un artista y arte de verdad.