En estos tiempos que corren todo coaching o entrenamiento profesional funciona estupendamente para conseguir mejores resultados. Para muchos escritores el coaching de visibilidad se ha vuelto una prioridad. Hay tantos libros en el mercado, tantos escritores, tantos sellos editoriales… y tan pocos lectores, que lograr la anhelada visibilidad es un factor determinante para vender esas novelas tan duramente escritas.
El escritor tiene varias herramientas para trabajar el entrenamiento en visibilidad, de forma asistida por profesionales expertos en la materia o bien mediante el despliegue de sus habilidades y aprendizaje personal.
La clave, en cualquiera de los dos casos, es hacer visible al autor y a sus libros a su público objetivo, ése que realmente puede estar interesado en comprar los mismos. El mundo editorial y literario está saturado, de modo que no es fácil destacar entre la oleada de títulos disponibles y alzarse como un faro que llame la atención de los lectores.
Los medios tradicionales (radio, televisión, prensa) están en manos de unos pocos que controlan el cotarro con mano de hierro dictatorial y cargados de prejuicios e ideología censora hacia todo lo que no sea de los “suyos”. Por fortuna, internet ha abierto las puertas a decenas de escritores que pueden competir de tú a tú con los autores “favorecidos” por las editoriales y los medios tradicionales. Es aquí, en internet, donde los escritores independientes podemos convocar a una audiencia de lectores interesados en nuestros libros y fieles a nuestras novedades.

Lograr esta comunidad de lectores no es fácil y requiere mucho trabajo, esfuerzo y tiempo. El training para alcanzar la meta es indispensable: estrategias de orientación de blog, participación en redes sociales, selección y escritura de posts y artículos de interés, promoción activa de los libros… Es la otra cara del escritor actual, que debe complementar su actividad tradicional de escritura con entrenamiento en diversas habilidades que le permitan mayor visibilidad, incluso en aspectos empresariales y editoriales. Porque hoy día, un escritor de éxito no sólo es un escritor, es también editor, empresario, agente promocional y profesional que entrena con coaching o sin coaching, pero que entrena. Lo que se dice un escritor completo. O, al menos, así debe ser el escritor que desee vender a su público objetivo… y al resto, si se tercia.