Donald Trump sigue presentando las nuevas iniciativas de cara a su segundo mandato presidencial. Después de la plataforma para garantizar la libertad de opinión y prensa, Trump ha anunciado un completo plan para combatir a los cárteles de la droga que tanto daño hacen a este país y que son verdaderos enemigos en las puertas de casa. Entre las medidas propuestas, destaca el despliegue de fuerzas especiales y otros activos militares para infligir el máximo daño posible a los cárteles de la droga que se infiltran y trafican por la frontera sur.
Trump acierta de nuevo al poner el foco de atención en este tema al asegurar que los carteles están «librando una guerra contra Estados Unidos» y que «ahora es el momento de que Estados Unidos haga la guerra contra los carteles».
En su declaración grabada en vídeo, Trump manifestó de forma correcta que: “Joe Biden se ha puesto del lado de los cárteles”. “Las políticas de fronteras abiertas de Biden son una traición mortal a nuestra nación”.
Después de más de dos millones doscientos mil inmigrantes ilegales indocumentados que han atravesado la frontera en el último año fiscal, entre los que había también muchos traficantes, eso es un hecho probado.
La declaración de Trump no es tanto una promesa electoral, que también, como un compromiso de naturaleza presidencial: «Cuando sea presidente, la política de Estados Unidos será acabar con los cárteles, tal y como acabamos con ISIS y el califato de ISIS, y así como, a diferencia de la situación en la que nos encontramos hoy, tuvimos una situación muy fuerte en la frontera. Mi Administración supervisó la frontera más fuerte en la historia de nuestro país».
Trump anunció que si es elegido «ordenará al Pentágono que haga un uso apropiado de las fuerzas especiales, la guerra cibernética y otras acciones abiertas y encubiertas para infligir el máximo daño al liderazgo, la infraestructura y las operaciones de los cárteles».
Trump se ha comprometido a designar a los principales cárteles como organizaciones terroristas extranjeras, algo esencial, ya que cortaría su acceso a los sistemas financieros globales. También pedirá al Congreso que apruebe una legislación que garantice que los traficantes de drogas y de personas reciban la pena de muerte.
A diferencia de Biden y de los demócratas que actúan de forma laxa, cuando no cómplice, en este tema, Trump habló con claridad y contundencia: “Los cárteles de la droga y sus aliados en la Administración Biden tienen la sangre de innumerables millones en sus manos: millones de familias y personas están siendo destruidas”.
Los datos, conocidos por todos, refuerzan una vez más sus argumentos.
“Cuando regrese a la Casa Blanca, los capos de la droga y los traficantes nunca volverán a dormir profundamente”, dijo Trump. «Lo hicimos una vez, y lo hicimos mejor que nadie».
Trump recordó la enorme seguridad fronteriza que hubo bajo su Administración, que fue verdaderamente fuerte y respetada, y añadió: “Y ahora se ríen de nosotros en todo el mundo, y no vamos a dejar que eso suceda por mucho más tiempo. Tenemos que tomar el control, tenemos que ser duros, tenemos que ser inteligentes, tenemos que ser justos. Pero si no hacemos algo de inmediato, nuestro país se irá”.

El plan de Trump llega en un momento de crisis provocada por las políticas de Biden, con números récord de inmigrantes ilegales y de criminalidad y tráfico de drogas y de personas en auge, e incluye las siguientes medidas:

• Restaurar todas las políticas fronterizas de la anterior Administración Trump y asegurar completamente la frontera.
• Desplegar todos los recursos militares necesarios, incluida la Marina de los EE. UU., para imponer un embargo naval completo a los cárteles, con el fin de garantizar que no puedan usar las aguas de nuestra región para traficar con drogas ilegales hacia los EE. UU.
• Ordenar al Pentágono que haga un uso adecuado de las fuerzas especiales, la guerra cibernética y otras acciones encubiertas y abiertas para infligir el máximo daño a los líderes, la infraestructura y las operaciones del cártel.
• Designar a los principales cárteles de la droga como organizaciones terroristas extranjeras.
• Cortar el acceso de los cárteles al sistema financiero global.
• Obtener la plena cooperación de los gobiernos vecinos para desmantelar los cárteles, o de lo contrario exponer completamente los sobornos y la corrupción que protegen a estas redes criminales.
• Pedir al Congreso que asegure que los contrabandistas y traficantes de drogas puedan recibir la pena de muerte.

Tal y como dijo Trump en su declaración: “Joe Biden ha pasado los últimos dos años desmantelando la frontera sur. Las políticas de fronteras abiertas de Biden están matando a estadounidenses inocentes, devastando comunidades estadounidenses, enriqueciendo a los cárteles y desestabilizando gran parte de México y América Latina”.
Hay muchos datos que respaldan esta afirmación, pero con uno solo lo vemos claramente: el año pasado se incautó suficiente fentanilo en la frontera sur para matar a todos los estadounidenses.
En suma, el régimen de Biden ha destruido la frontera, fomentado el tráfico de drogas, y creado anarquía e inseguridad. Donald Trump destruirá los cárteles de la droga cuando regrese a la Casa Blanca.